La palabra ubicuidad, define de manera óptima el momento por el cual pasa, el cantante nacional Américo. Ya que desde hace más de un año, no ha parado de tener presentaciones en todos los escenarios del país, incluyendo su exitosa actuación en el Festival de Viña del Mar que marcó el momento más visto del evento con 57 puntos de sintonía.
Esta mediática presencia, sin duda le ha traído el gran éxito que ostenta actualmente. A modo de ejemplo, su última producción "Yo soy" ya alcanzó el disco de platino por ventas superiores a 20 mil unidades y "A morir" ya sobrepasó las 50 mil.
No obstante y como lo han señalado algunos críticos musicales, esta sobreexposición podría jugarle en contra, debido a que corre el riesgo de saturar a los oyentes; aunque en este instante nuestro reducido mercado nacional, lo ha convertido junto a otras figuras chilenas como La Noche, Chico Trujillo y Natalino en tabla de salvación de la alicaída industria discográfica.
Si bien su música transversal y sus temas han quedado en el imaginario melódico de Chile, Américo pretende sortear este riesgo internacionalizando su carrera, y ya tiene un plan trazado. Perú será la primera escala de una gira que lo llevará a lugares como Argentina, Bolivia (país que ya ha visitado), Ecuador y Suecia donde se presentará en el prestigioso Festival de Estocolmo. Habrá que esperar los frutos de este plan de acción, mientras tanto tendremos que confiar en el producto nacional y ver si este intérprete logra conquistar nuevas audiencias. Otra cosa que nos queda es dejar de lados los prejuicios y disfrutar hasta donde podamos, estas pegajosas canciones de amor tropical.
